Por mi raza hablará el Piporro

Archive for the ‘A veces me da por escribir’ Category

In A veces me da por escribir on marzo 9, 2009 at 1:32 pm

Ayer domingo fui al Saltillo, así llamaba mi padre -liberal de ideas y conservador de habla-, a la hermosa capital de mi estado. En modesto restorán, degusté riquísima paella y rematé con postre de capirotada, mientras un trío de jóvenes con cara y actitud de universitarios rebeldes, entonaba sones cubanos, canto nuevo y remembranzas al Ché Guevara.

Yo amo Saltillo. Vacacionaba ahí cuando pequeño. En compañía de mi padre, gocé un día de comprar fresas con crema en la Alameda y luego hicimos el tradicional recorrido por la calle de Victoria, hasta la plaza de Armas. Jugué varias veces en la fuente que está frente a Palacio y disfruté la historia de esas calles contada por papá…. «en esta casa estuvo Hidalgo, en esta otra Benito Juárez, aquí se suicidó el gobernador…» el mundo de la historia contada por mi padre, era la mejor de todas las leyendas; y, al medio día, papá y yo comíamos tacos en la contraesquina del García Carrillo.

Cuando mayor, soñé con estudiar en Saltillo como lo habían hecho ya el resto de mis hermanos. Quise ser egresado de Jurisprudencia, tener una graduación en el paraninfo, una misa en Catedral y luego invitar a mi padre a tomar un café y volver a caminar por esas calles el día que me entregaran mi título. Un sueño incumplido, ciertamente… Dios quiso que las cosas fueran distintas.

Ayer que estuve ahí, recordé esos sueños que ahora son sólo añoranzas. Mientras iba de Alameda a plaza de Armas, quise sentir que mi padre iba conmigo y busqué escuchar sus pasos y oír el histórico discurso de su voz. Pero ahora me tocó ir solo. Por la remozada calle de Victoria, me fui pensando si un día, el lugar que ocupó mi padre lo ocuparé también yo. Y si un día llevaré de la mano un cuerpo infantil de carita sonriente y maravillada -o quizás dos-, al que contaré las historias que papá contaba para terminar comiendo juntos en cualquier modesto restorán, sonriendo  felices un día normal. No lo sé. Lo deseo profundamente, es cierto. Pero es que hay veces que uno desea… y Dios, simplemente quiere que las cosas sean distintas.

Ayer domingo fui al Saltillo… y creo que todavía sigo ahí.

Anuncio publicitario

Mariachi coyote

In A veces me da por escribir, Monterrey, Nuevo León on marzo 2, 2009 at 1:41 pm

11 de la noche, Monterrey, Nuevo León. Balcón de mi casa al pie de las Mitras. Los vecinos duermen, la luna ilumina tímidamente el filón de la cima. Me fumo un cigarro, me tomo un tequila y de pronto llega de allá de lo lejos un aullido largo, que corta el silencio, la monotonía.

Un aullido largo, largo, de un coyote viejo seguido por su jauría. El coyote aúlla y la jauría ladra, con ese ladrar agudo de hembra coyote, o de coyote cría.

11 de la noche. Monterrey, Nuevo León. Balcón de mi casa al pie de las Mitras. Me fumo un cigarro, me tomo un tequila. Y un mariachi cánido me trae serenata con canciones tristes, de melancolía.

Mariachi coyote, que bajó cantando de allá de las Mitras.

EuK
Mty, N.L. Tiempo de frío de 2009.

Dos poemas sueltos

In A veces me da por escribir on enero 23, 2009 at 11:54 am

Dos días, una eternidad
De aquella triste mañana.
De tu pequeño cuerpo diciendo adiós.
De tu voz que me canta.
Del avión que despega
Y se lleva mi alma.
De mi piel en el frío
Que evapora mis lágrimas.
Dos días de una eternidad
De extrañarte
Miranda.

_________

¿Por qué me miras así, Regina?
Si soy tan malo y tan tonto
Y tú me das tu sonrisa.
Tu mirada inocente
Que me dice te quiero
Tus ojitos brillantes
Que me miran sincero.
¿Merezco yo tu sonrisa, Regina?
¿Me podrás enseñar a reírle a la vida?

El Norestense

In A veces me da por escribir, Norestense on noviembre 28, 2008 at 12:25 pm

(Ahí se los dejo, a ver quién le pone música)

Me dicen el norestense
¡Valiente, de corazón!
Y bailo al son de un huapango
Huasteco y con acordeón.

Del Conchos al Bravo vengo
Del Nazas al golfo voy
Me dicen el norestense
¡Valiente de corazón!

Nogal, mezquite y huizache
Encino y pino yo soy
Cambié por bota el huarache
Porque cabalgante soy.

Coahuila me dio la vida
Tamaulipas chamba y comida
Mi casa está en Nuevo León.

Me dicen el norestense
¡Valiente, de corazón!

 

EuK. Mty, N.L. Otoño boreal de 2008.

A un año de Cuarto Circuito

In A veces me da por escribir, De aquí y de allá on noviembre 20, 2008 at 3:25 pm

Se cumplió el primer año de mi otro Blog. uno bastante serio a comparación de éste, pero bueno, no sólo de diversión vive el hombre.

En conmemoración, los invito a visitarlo, espero que les guste:

www.cuartocircuito.com

Y como dijo aquél, ¡Que se diga de los norestenses, que nos atrevimos a soñar muy alto! Ajúa!